Hay analistas y tertulianos para los que anunciar el fin del mundo es un medio de vida. Es lo que los hace populares y su postura siempre es bajista, aunque, curiosamente, algunos gestionan fondos de inversión o carteras de valores que están posicionados en renta variable. Y hay casos todavía más curiosos, de gente que interviene en los medios hablando de las acciones, los bonos o los fondos de inversión pero no trabaja en los mercados. No podemos tomarnos en serio a ninguno de ellos, igual que tampoco podemos tomarnos en serio a los optimistas patológicos.
Pero Bill Gross es un profesional. Esto significa varias cosas: primero, que no entra en la categoría de agorero. Segundo, que a personas como él hay que escucharlas aunque no se esté de acuerdo con ellas. Tercero, que aunque sean buenos profesionales, no siempre aciertan. En este sector los mejores son los que aciertan más veces que se equivocan, porque nadie acierta siempre.
Como habrán observado, actualmente soy optimista respecto a la evolución de la economía y de los mercados a medio plazo. Pero en esta ocasión el señor Gross no lo es. Veamos por qué, utilizando como base la entrevista que le hicieron recientemente en Bloomberg y que paso a resumirles.
Parte de la base de que el crecimiento económico es fruto de dos factores: el incremento de la fuerza de trabajo y la productividad.
Actualmente el mercado descuenta en sus precios que el presidente Trump alcanzará su objetivo de crecer al 3% anual, pero, como comenta Gross, el incremento de la fuerza de trabajo está en el 1% y hace tiempo que la productividad sólo crece medio punto porcentual cada año. En esas condiciones, Bill Gross considera difícil que la economía pueda crecer al 3%.
En su opinión, ese crecimiento menor de lo esperado generará frustración entre los inversores, deteniendo la subida de los activos de riesgo o incluso generando bajadas. Además, cree que la Reserva Federal será incapaz de reducir su balance porque es demasiado grande.
Finalmente, ante la pregunta de dónde tendría su dinero si lo ve tan poco claro responde que en bonos de mediana duración y que evitará las duraciones largas y el “High Yield” (bonos de alto rendimiento).
¿Acierta el señor Gross? Yo creo que no, que es demasiado pesimista para la situación actual. No voy a repetir mis argumentos ya que los tienen ustedes en este informe y en los anteriores. Pero las opiniones contrarias, cuando viene de alguien válido, son de gran utilidad, porque en la medida en que se vayan confirmando sus predicciones deberíamos revisar las nuestras.
Bill Gross nos está diciendo que vigilemos los datos de crecimiento y todo lo que le afecta que, por cierto, no son solo la productividad o la fuerza de trabajo. Y yo, que le tengo todo el respeto que como profesional merece, voy a vigilar para ver si van saliendo datos frustrantes como espera él, o lo contrario. Con objetividad, sin aspavientos, sin tomar partidos personales, es decir con una visión profesional y de mercado, no de tertulia.
Como en el caso de otros gestores y en aras a evitar el conflicto de interés, les informo sobre el tipo de fondos que gestiona el gestor “invitado”: Bill Gross es un gestor de renta fija, básicamente norteamericana.