Hace varios meses que insisto en que hay que buscar alternativas a los fondos de renta fija. Sí, lo sé: es muy difícil desprenderse de esos fondos que te llevan dando rentabilidad positiva – con algunos sustos – desde hace décadas. Especialmente cuando el mejor resultado te lo han dado precisamente el año pasado. Pero les puedo asegurar que en economía no hay nada eterno y estamos hablando de 30 años de bajadas de los tipos de interés y, en consecuencia, de subida del precio de los bonos, que es donde invierten los fondos de renta fija (2).
Además, quién se lo dice ha sido de los analistas que han ido más lejos a la hora de recomendar fondos de renta fija pues. hasta el “Cuaderno” del mes de Agosto, en mi cartera modelo había un ETF de bonos europeos de largo plazo. Aparte de que llevo muchos años recomendando renta fija soberana y corporativa, precisamente para aprovechar la histórica bajada de los tipos de interés que supone la “japonización” que predije para los bonos europeos (1).
No he estado entre los que hablaban de la “represión financiera” mientras el vehículo preferido de los ahorradores, el fondo de inversión de renta fija obtenía los mejores resultados de su historia. Pero, como dije hace un par de meses, ahora sí que empieza la represión financiera. En forma de fondos de renta fija que darán poco, nada o incluso rentabilidad negativa.
Ahora sí que empieza la represión financiera. En forma de fondos de renta fija que darán poco o nada.
No voy a insistir sobre los motivos que me llevan a realizar esta afirmación, no quiero repetirme y además los tienen en diferentes epígrafes de renta fija de “Cuadernos editados desde el mes de Julio del año pasado, que ahora están disponibles en la hemeroteca que hemos creado en la web victoralvargonzalez.com en la pestaña “Cuadernos”.
Aunque todo es posible, veo muy difícil que bajen mucho más los tipos de interés, porque eso significaría, por ejemplo, que Alemania cobraría más del 1% porque le presten dinero. Y que España acabaría cobrando por prestar en todos los plazos, cosa que ahora solo ocurre en plazos menores a 10 años. Y eso le resulta difícil de creer a incluso a quien, como yo, ha insistido durante años en la tendencia bajista de los tipos de interés del mercado.
Y si dejan de bajar los tipos de interés dejará de haber plusvalías en el precio de los bonos y lo que se notará son las elevadas comisiones que aplican los fondos de renta fija.
Si no hay cupón pero hay comisiones y además no suben los precios de los bonos en cartera el resultado es rentabilidad cero o negativa. Y para muestra un botón: desde que empecé a recomendar sustituir los fondos de renta fija euro, o han perdido valor o han dejado de ganarlo, mientras que los sustitutos han ido muy bien.
La mejor sustitución para un fondo de renta fija no es un fondo sino la mezcla de un determinado tipo de fondos.
Con lo que llegamos a la parte más interesante: qué fondos pueden sustituir a los fondos de renta fija sin que el cambio implique asumir un gran riesgo.
El mejor sustituto es el que se conoce como fondo mixto de renta fija conservador. Pero no es el único y, de hecho, la mejor sustitución es una mezcla de determinado tipo de fondos. Y tampoco vale cualquier fondo mixto. Los bonos en cartera deben ser de una duración relativamente corta, de renta fija corporativa (porque todavía da algún cupón aunque sea pequeño) y, muy importante, que la parte de renta variable sea del estilo que se conoce como “de valor”.
Hemos hablado en otras ocasiones de este estilo de inversión. Sin entrar a juzgar que estilo es mejor, si el “value” o el “growth” por no perder el hilo, el estilo de “valor” en la selección de compañías tiene la enorme ventaja de que suele aguantar mejor en las caídas. En otras palabras, estamos colocando una “guinda” de renta variable en un pastel de renta fija y esa guinda es la que nos da la rentabilidad extra que necesitamos, pero la guinda no es especialmente volátil y su volatilidad se diluye con la baja volatilidad del pastel.
Resumiendo, el pastel tiene que ser renta fija de corto plazo, tiene que ser corporativa y la guinda tiene que ser renta variable de estilo “value”.
Luego están determinados fondos multi estrategia y de retorno absoluto. La desventaja es que son mucho menos predecibles. Son una apuesta por el gestor. Obviamente en el caso de un cliente de Nextep son nuestros analistas quienes se ocupan de seleccionarlos, pero la selección de gestores es complicada y ocurre como con los “ojeadores” de los jugadores de fútbol: incluso el mejor puede equivocarse. Aun así es una buena opción, porque un buen gestor que tenga en su mano jugar con diferentes tipos de activos tiene la capacidad de aprovechar algo inherente a los mercados: que siempre que baja un activo hay otro que sube.
La solución es un mix de fondos: mixtos conservadores “value”, renta variable de empresas europeas de servicios públicos, inmobiliarios y oro (ETF).
Nuestro servicio de análisis también ha localizado otras dos opciones interesantes como productos sustitutos de la renta fija. Una es lo que llamamos “ser como nuestros abuelos”, es decir, comprar acciones de empresas europeas de servicios públicos, es decir, de eléctricas, autopistas etc., cuya característica principal es que ofrecen un alto dividendo. Que además suele ser predecible y estable. Pero, en lugar de comprar las acciones directamente como nuestros abuelos, utilizaremos fondos de inversión y, mejor todavía ETFs, qué es lo que habrían hecho nuestros abuelos si hubieran tenido las ventajas que representan ambos productos. Pero la idea es la misma y desde luego los recomendados en la Nota de Análisis que enviamos desde Nextep hace seis meses con productos concretos están funcionando extraordinariamente bien (+12%) y, muy importante: casi no se han movido durante la corrección.
El otro sustituto de la renta fija es el oro. Es mucho más volátil que los bonos y no da ningún tipo de cupón, pero es el sustituto natural para los ahorradores más conservadores. En países como Alemania hay una gran tendencia a invertir en oro. Y también en Asia o India.
Es curioso como funciona la psicología de los inversores, porque el valor del oro oscila mucho y se ha llegado a perder mucho dinero, pero como la tendencia cuando se compra oro es a la acumulación y no se está pensando en comprar y vender, el oro no ha perdido su condición de activo refugio. La posibilidad de comprarlo a través de ETFs facilita enormemente la tarea y disminuye los gastos. Por eso desde Nextep también sacamos una Nota de Análisis al respecto, nota que sigue a disposición de los clientes, incluidos los de nueva incorporación.
Finalmente, el otro activo que les gusta a los ahorradores y los inversores más conservadores es sin duda el inmobiliario, con lo cual y como dije a hace tiempo, el mercado inmobiliario va a tener dos vientos a favor: que el dinero del Banco Central europeo en lugar de ir a la economía productiva se está yendo al ladrillo y que los inversores en bonos cuando vean que los bonos dejan de funcionar se llevarán gran parte de ese dinero al ladrillo. Ampliamos este asunto en el capítulo siguiente.