Hasta que podamos ofrecer el servicio de asesoramiento personalizado, donde se recomendarán fondos concretos y carteras a la medida de cada inversor, incluiré en este informe tres carteras modelo. Son las carteras genéricas que tendría yo para los tres perfiles de inversión más comunes, es decir, conservador, equilibrado y agresivo.
No se incluirán nombres de productos concretos porque, de acuerdo con la legislación vigente, en informes como este sólo se puede hablar de carteras genéricas para perfiles genéricos, no de recomendaciones de productos concretos para perfiles personalizados. Eso queda para nuestro futuro servicio de asesoramiento. Manténgase suscrito a estos “Cuadernos” y podremos avisarle cuando esté disponible. Si se dan de baja, la LOPD nos impedirá ponernos en contacto con Uds. para informarles del lanzamiento.
Así que, hasta entonces y con objeto de ofrecerles el máximo posible de información dentro de las limitaciones que marca la ley, haré aquí una descripción lo más clara posible de los activos que tendría yo en cartera para cada perfil de riesgo. Entiendo que esto facilitará su identificación por parte del lector y/o de su asesor o distribuidor habitual de productos financieros, que podrá estudiar con él la idoneidad de incluirlo en cartera, siempre de acuerdo con su perfil de inversión. Si su asesor no entendiera estas descripciones, mi sugerencia es que cambie de asesor, puesto que para un profesional mínimamente cualificado resultan extremadamente sencillas de entender. Y Ud. necesita un asesor mínimamente cualificado si va a invertir.
Vamos, pues, con las carteras. Como saben, acabé el año con posiciones muy defensivas, que sugerí tomar antes de la corrección de Octubre – en el caso de los perfiles conservadores y equilibrados – y poco después de la misma en perfiles agresivos (dado que estos contaban con la cobertura de que los fondos de renta variable estaban en dólares) (1)
Inicio ahora el año incrementando ligeramente las posiciones en renta variable, porque me parecería un crimen no aprovechar el pánico que se ha generado en el mercado. Tampoco quiero tomar una exposición importante hasta que la Reserva Federal confirme que se ha dado cuenta de que se está “pasando de frenada” y, también muy importante, hasta que Estados Unidos y China cesen las hostilidades en su guerra comercial. Porque hasta que no se den estas dos condiciones va a ser muy difícil que haya una recuperación consistente en las bolsas.
En renta variable he concentrado toda la posición en el fondo global, sin tener una posición diferenciada en el Nasdaq. Esto simplifica las cosas sin que varíe significativamente la composición sectorial, dada la fuerte presencia del sector tecnológico en la parte del índice global que corresponde a la economía USA.
Inicio el año incrementando ligeramente las posiciones en renta variable. Me parecería un crimen no aprovechar el pánico que se ha generado en el mercado.
He reducido la exposición al dólar. Si, como espero, la Reserva Federal se va dando cuenta de que tiene que frenar la subida de tipos, el dólar pierde ese aliciente (cuando suben los tipos de interés USA sube la remuneración de los activos a corto plazo en dólares) (1)
En cuánto la renta fija europea, aunque es probable que se puedan hacer cosas en el futuro si Europa finalmente se “japoniza” – lo cual no es descartable -, mientras tanto prefiero tener el dinero en cuenta corriente y en un ETF referenciado al índice Barclays EU Aggregate Bond Index, tal y como explico en el epígrafe “Hágase un fondo mixto conservador a la medida”. No quiero tener un fondo de renta fija, mixto o monetario que pierda dinero, como ocurre con la mayoría de ellos.